Dieta de Proteínas ¿Funciona?

La dieta de proteínas y baja en carbohidratos ha sido promovida en los últimos años como una manera efectiva de perder peso. De manera general podemos decir que en la dieta de proteínas se recomienda que entre un 30 a 50% de las calorías totales provengan del consumo de proteínas, que es el casi el doble de la cantidad de proteína recomendadas.En general podemos pensar que un aumento en el consumo total de proteína no es una mala idea ya que las proteínas juegas un papel fundamental en la producción de enzimas, hormonas y numerosas otras células. Sin las proteínas nuestro organismo no podría funcionar. Sin embargo, ¿Es la dieta alta en proteínas lo que necesitamos para perder peso?.

En qué consiste una dieta de proteínas.

Según los expertos, la dieta de proteínas es un familiar cercano de su famoso predecesor de la dieta baja en hidratos de carbono. Mientras que las dietas como la del conocido Atkins se centran en la intensa restricción de carbohidratos, las dieta de proteínas se centra en el consumo alto de proteínas que te deja satisfecho y saciado.
Normalmente un cuerpo sano utiliza los carbohidratos como fuente de combustible, suministrando energía al cerebro, al corazón, y al resto de órganos del cuerpo. En estas dietas bajas en carbohidratos y alta en proteínas el cuerpo no tiene suficientes carbohidratos para utilizarlos como fuente de combustible, de modo que se ve forzado a entrar en un estado metabólico conocido como cetosis. La cetosis en el proceso por el cual el cuerpo descompone sus reservas de grasa para utilizarlos como combustible, y en ese proceso se producen las cetonas. Cuando el cuerpo entra en un estado de cetosis, las personas que están a dieta tienden a sentir menos hambre y tienen menor tendencia a comer, lo cual nos puede parecer una buena idea si estamos tratando de bajar peso. Según un estudio publicado por la A. J. G. E., los participantes que mantuvieron su consumo de proteínas a un 30% de las calorías totales (carbohidratos eran un 50% y grasas un 20%) experimentaron una mayor satisfacción, menos hambre, pérdida de peso y mejora del estado general de las. Además consumieron un promedio de 441 calorías menos de lo habitual.

En un estudio publicado por la revista de nutrición, las dietas que combina una dieta de proteínas con ejercicio mejoraron su nivel de grasas sangre total y también perdieron cantidades significativas de peso. A pesar de que los investigadores no terminan de entender exactamente como el consumo de proteínas reduce el apetito, muchos creen que la causa es que en estas dietas el cerebro recibe niveles inferiores de hormona estimulante del apetito.

Cuánta proteína necesitamos realmente.

Se recomienda una amplia gama cuando hablamos del porcentaje del consumo de proteínas, de un 10 a un 35% de las calorías totales.Por ejemplo, si seguimos una dieta de 1800 calorías, podríamos consumir de 45 a 218 g de proteína por día. La mayoría de personas, se ha demostrado que no tienen problema en consumir la cantidad recomendada de proteínas en su dieta, sin embargo, aumentar esta cantidad para adecuarla a una dieta de proteínas, y baja en carbohidratos puede ser difícil de seguir. Para conseguir este alto consumo de proteínas deberemos elegir una gran variedad de fuentes, como la proteína de la carne de las aves, el pescado, nueces, semillas y legumbres. Podríamos recurrir a la toma de batidos de proteínas para rellenar huecos a lo largo del día.

Todos estos consejos pueden sonar muy bien y magníficos en un primer momento, pero los investigadores aún no han sido capaces de determinar los efectos que una dieta de proteínas podrían tener a largo plazo, por lo tanto puede no ser seguro el uso de este tipo de dietas durante períodos de más de seis meses.

Estamos dispuestos a sufrir estos riesgos, sacrificando los beneficios de una dieta sana. La dieta de proteínas produce una pérdida de peso que puede ser temporal, y cuando volvamos al consumo habitual en nuestra dieta podemos recuperar el peso perdido.